Esta historia transcurre en los difíciles años de la posguerra española, una época oscura y llena de injusticias en la que la mayor parte de la población sobrevivía a duras penas y en la que personas sin escrúpulos, amparadas por el Régimen, aprovecharon su situación para pisotear a los que habían salido más débiles de la contienda.
Un día de febrero del año 1942, después de pasar una larga temporada con sus tíos, Luis por fin vuelve a casa de la abuela Rosalía en la que le esperan también su madre, Isabel, y sus dos hermanos pequeños, Fermín y Carmencita. Para hacer frente a las dificultades han preparado un par de habitaciones para acoger algunos huéspedes. Es con la llegada del último inquilino, un enigmático hombre que viene de la capital, cuando Luis se da cuenta de que todo ha cambiado, de que ahora la casa y hasta su propia vida están llenas de secretos, misterios y peligros que lo amenazan a él y a toda su familia, y de que aunque encuentre todas las respuestas que busca nada volverá a ser igual.