Triste pero muy bonito. La lectura se hace muy amena y nada forzada. Es tan breve que es perfecto para leerlo en un trayecto de autobús/metro/etc. También da para reflexionar sobre lo que puede llegar a ser (o no) el futuro... La perspectiva desde la que está contada la historia me parece muy original. En conclusión: merece mucho la pena leerlo.