Bastante bien :)
Voy a empezar diciendo que mea culpa absoluta porque pensaba que esto era una antología de cuentos de hadas y claro, he ido con unas expectativas diferentes a las que tendría que haber tenido. Repito:...
Voy a empezar diciendo que mea culpa absoluta porque pensaba que esto era una antología de cuentos de hadas y claro, he ido con unas expectativas diferentes a las que tendría que haber tenido. Repito: no son cuentos de hadas; son cuentos normales y relatos cortitos.
Dicho esto, aún así la antología me ha gustado. Había cuentos muy buenos, cuentos que me han gustado menos, algunos deprimentes (sí, he llorado) y otros más cuquis, de magia y sin ella, así que hay para todos los gustos. En general, es una recopilación bastante sólida y he disfrutado leyendo.
Algo que me ha encantado es que en los cuentos de pura fantasía la narración rimaba. Yo no sé rimar ni por equivocación, así que siempre me hace mucha ilusión cuando la prosa es «musical» y además cuenta una historia; es algo que me parece admirable. El tener un narrador dirigiéndose al lector también ha sido un puntazo en algunos cuentos, especialmente cuando se narraban como fábulas o mitos olvidados.
Me ha gustado también la gran variedad de temas de los relatos, no hay dos iguales y algunos eran realmente muy imaginativos. De hecho, creo que la variedad es una de las claves de esta antología: no hay dos cuentos que se parezcan en longitud, tema, manera de narrar... Cada uno era absolutamente único, así que yo iba ahí a la aventura.
Sin embargo, precisamente esta «aventura» es lo que me ha dejado un poco meh. Uno de mis mayores problemas cuando leo antologías (me pasa siempre, si es que no aprendo) es que los cuentos están por ahí desparramados en vez de organizados por temas, y aquí también ha sucedido esto. Los cuentos más españoles (que hablaban de la tierra de la autora, o del accidente de AVE de Santiago) hubieran estado mejor todos juntitos, y lo mismo sucede con los de pura fantasía, los que tiraban más a ciencia ficción, etc. Yo los hubiera juntado por secciones, con su correspondiente titulito de sección (hubiera sido chulo que fueran en referencia al bergantín del título; por ejemplo, «las velas», «los cañones»), y así el lector (yo) sabe un poco qué esperar. Pero eso son cosas mías.
En general, es una antología que se lee fácil y rápidamente, y es entretenida; ideal para hacer como yo y leértela toda de una sentada mientras pasas calor, o para leerla poco a poco. La portada es chulísima y la edición, con los dibujos, me ha encantado. Los cuentos han tenido sus más y sus menos, pero es lo que tienen las recopilaciones así que, de nuevo, soy yo que no aprendo.
• Lo mejor: Cuentos, baby.
• Lo peor: La «desorganización».
Le doy un 3'5/5, pero le pongo cuatro estrellas.
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