Primer capítulo de la premiada novela de Ginn Hale.
Belimai Sykes es muchas cosas: pródigo, descendiente de demonios antiguos, criatura de oscuras tentaciones y poderes excepcionales, y un hombre con un pasado cruel y una peligrosa adicción.
También es el único hombre al que el capitán William Harper podrá acudir cuando tenga que vérselas con una serie de horripilantes asesinatos. Pero el señor Sykes no trabaja gratis, y la compañía de Belimai le costará al capitán Harper mucho más que su reputación.
Desde las opulentas mansiones de la aristocracia, donde un baño de oro oculta una trama de vivisección y brujería, hasta los humeantes barrios marginales de Quinto Infierno, el capitán Harper habrá de pelear por la justicia… y por su propia vida.
Sus enemigos son multitud, y su único aliado, un demonio al que conoce demasiado bien. Tales son los peligros de tratar con los desalmados.