Guauuuu, qué bonita historia Daniel. Me has conmovido, me has emocionado, has despertado en mí la nostalgia de la juventud, esos años locos, de inconsciencia, de desenfreno... pero sobre todo, de música, de sentir, olvidar, amar... vivir, en fin, en las cuerdas de una guitarra. La historia me ha parecido preciosa, emotiva, real y sobre todo muy muy conmovedora. La forma de contarla, muy original. Cambios continuos de narradores, de tiempos, que al principio te desconciertan pero que te atraen deseando saber quién es ese narrador omnisciente que te toca la fibra sensible. Pero con todo, lo mejor para mí, es ese cambio de registro entre el primer, Segundo y el resto de capítulos que te llevan a un camino totalmente inesperado. En resumen, una novela corta pero intensa, y contada además de una manera sencilla pero impecable, donde la música es esa alma torcida que todos tenemos y deseamos no o,vidas nunca. Gracias Daniel, me has emocionado con tu historia. Mi alma romería y ochentwra te lo agradece.