A veces hay pequeños momentos de descanso en la Islandia, aunque sean de forma forzada.
Mientras parte de la tripulación repara los motores, otra parte se dedica a disfrutar de estos días de permiso o poner al día el papeleo.
Un pequeño relato costumbrista y pausado que nos permite conocer los intereses amorosos de la tripulación, como funcionan las cosas fuera de las Corporaciones y porque poner al día al papeleo es lo peor que puede pasar a la capitana Gulagdóttir.