Erika está muerta.
Está atrapada en el Purgatorio y no recuerda apenas nada de su vida anterior.
Erika no está conforme.
Es demasiado joven para estar muerta, y lo sabe.
Erika quiere volver a la vida mortal.
Y no parará hasta conseguir su objetivo, aunque eso implique acabar con la vida de algún inocente.