Considerado por la crítica como lo mejor de la obra poética de César Vallejo, “Poemas humanos” se acerca mucho más al concepto de “universalidad” que sus anteriores creaciones. Bajo ese título se agrupan poemas escritos entre 1931 y 1937, que fueron publicados póstumamente, con el criterio y organización de Georgette Vallejo, viuda del poeta.
El poemario se adentra en la pobreza y el hambre, en la miseria humana, en el cuerpo como espacio de dolor y de liberación, en el trabajo como fuente de solidaridad y en la esperanza en un futuro lleno de dicha colectiva.
La obra refleja la concepción de la solidaridad como eje fundamental para el desarrollo del hombre y de la sociedad. Situando lo colectivo por encima de lo individual, tal y como sucedió en el mundo prehispánico, el cual conocía en profundidad el autor.