Josefa, 89 años, natural de Barcelona, participa en un experimento: va a enlazarse con une inteligencia artificial para revertir su alzhéimer avanzado.
Si todo va bien, el procedimiento podrá aplicarse a todo el que lo necesite.
Tiene que ir bien.
Además de reparar su cerebro, le IA se encargará de que Josefa mantenga unos hábitos de vida saludables y adecuados. Comida sana, vida sana, cuerpo sano. Nada de excesos.
Por desgracia, Josefa tiene otros planes.