Es mayo de 1660. El señor Amberry es un opulento comerciante londinense que, tras comprar un nuevo navío, al que llamará El Arco Celeste, pretende enviarlo con todos sus bienes comerciales a Cádiz y el Mediterráneo, con el objeto de que vuelva a la ciudad vacío pero cargado de millones. Con este dinero, fruto de toda su carrera profesional, pretende dotar a su hija Katty, la más bella doncella de la capital. El matrimonio ya está apalabrado con míster Arturo Forsytk, un tendero de hierro viejo reconvertido en millonario gracias a su trabajo. El conflicto radica en que Katty no lo puede ni ver. Es más, la joven está enamorada del tenedor de libros, Alfredo Duff. Este también la ama, pero sin un chelín en el bolsillo difícilmente puede rivalizar con el viejo. Los dos jóvenes se separan una semana antes de la partida del navío con la promesa de amor eterno y la feliz resolución de su problema.