Un grupo de jóvenes escritores se reúne semanalmente para dar cuenta de sus avances literarios. Entre ellos destaca Rafael, un joven poeta, que un buen día, sin mediar palabra, deja de asistir a la cita. Carlos, trasunto de Coello y narrador del relato, lo encuentra dos meses más tarde y comprende que la ausencia se debe al enamoramiento de su amigo. Otros dos meses después, mientras el grupo de escritores comenta la idea de Carlos de escribir un relato titulado El otro mundo, reaparece Rafael, mostrándose dispuesto a suicidarse por el bien de la ciencia, confiado en las teorías del magnetismo para relatar después qué existe más allá de la muerte. A través de la pluma inconsciente de su amigo, hace llegar su fantástico relato, que nos muestra, como manda la tradición literaria, el infierno, el limbo, el purgatorio y la gloria.