José es ayuda de cámara en la casa de un conde. Benita es la doncella de la condesa. Ambos sirvientes se enamoran y, entre arrumaco y arrumaco, echan pestes de los señores a los que sirven. Una vez casados, deciden probar su propia fortuna y para ello abren una tienda de cuellos y puños de camisa en el quinto piso de una calle del centro de Madrid. Lejos de irles mal, continúan ascendiendo en la escala social conforme van bajando pisos de escalera del edificio. Y tras la tienda de lujo llegan las inversiones en bolsa y, con ellas, más dinero todavía. Tanto es así que llegan a tener millones de reales y sirvientes contratados en su casa. Tan solo les falta el título de condes para alcanzar la completa felicidad. Pero la vanidad y la avaricia se enfrentan, pues duele en el bolsillo el tener que cambiar oro por oropeles.