Esta novela sigue el tono de la anterior, pero no tiene nada que ver e incluso se puede leer sin recordar nada de la anterior (como fue mi caso). Es una novela en la las cosas que pasan son mas a nivel interior de los personajes que sucesos como tal. El ambiente es el mismo que en la anterior, con la mezcla de especies del mundo galáctico ideado por Chambers, pero se centra mucho menos en las relaciones entre ellas pasando a tratar el tema de la relación con las IAs. Es una novela pausada, calmada, aunque con momentos de cierta intensidad emocional, para leer como desconexión del ajetreo de otras novelas.