Kathrina siempre ha estado muy en contacto con las fuerzas del «más allá». Ella es vidente, y precisamente por eso los novios no le duran demasiado. Vive en soledad después de una serie de fracasos sentimentales, y arde en deseos de encontrar a una pareja estable.
Entonces acude a un programa televisivo que se dedica a emparejar a personas que no se conocen, con la esperanza de encontrar allí a su media naranja. Solicita a una persona «espiritual», y le presentan a Lucas, un hombre que parece sintonizar muy bien con ella.
La cita parece ir sobre ruedas, hasta que al final de la misma, él dice algo que hace huir a la chica.
Determinada a no saber nada más de esa persona, pierde todo contacto y procurará olvidar lo que ha pasado.
Sin embargo, las cosas se pondrán de tal manera, que comenzará a buscarle de forma desesperada para poder mantenerse con vida.