Sylvia, una joven de clase alta acostumbrada a la buena vida, intenta escribir una nueva novela romántico-erótica pero la inspiración ha desaparecido, sus editores la presionan, debe concluir el libro en tres meses, así que prueba nuevas formas para adquirir ideas. Sale al mundo que no conoce, lo explora y se empapa de él, se contagia de la vida, y de la muerte. La vida real como máxima inspiración.