Esto es una historia. No es necesariamente buena, quizá ni siquiera busque eso.
Me gusta verlo como si, un día, te abriese la puerta de mi casa, te ofreciese asiento. Y en un momento de la velada suelto un montón de chatarra y basura sobre la mesa y la revolvemos juntos, y a veces encontramos recuerdos que nos cortan y nos hacen llorar, que escuecen, y a veces encontramos otros que son caricias en el alma y besos en la frente.
Me gusta verlo así, más que como abrirme sin más y esperar que mis entrañas sean de agrado. A veces, simplemente están, son.
A veces, simplemente somos.
La autora ha conseguido transmitir un montón de sentimientos y pensamientos en tal solo 37 páginas llenos de poesía, vivencias y reflexiones. Nos ha ofrecido un pedacito de ella y debemos agradecérsel... Más
Un poemario breve pero intenso en sentimientos, que habla del amor y el desamor, la soledad y el poder de superación que vive en cada uno de nosotros. Me remitido a la adolescencia, cuando los sentimi... Más