Este relato es puro sentimiento, tan real como duro. En él la autora nos presenta al lobo con piel de cordero que se esconde tras la enfermedad, mostrándonos la peor cara de esta, la que parasita en ti y se apodera de tu razón, la que te mina de tus mayores miedos para, después, ofrecerte una mano envenenada.
Eso es Cuando te pierdes, un recorrido por el más profundo y oscuro viaje de la depresión.
Me parece una maravilla mostrar algo así desde un punto de vista tan sincero.