Es esa época del año: la adivina llegará esta noche a la aldea vikinga Malene para anunciar su fortuna a sus habitantes. Lo que en un principio son promesas de felicidad y ansias por un futuro brillante, pronto se tornarán en funestas palabras que atraparán a más de uno de los habitantes de la aldea, entre ellos a los jóvenes Sybil, Daren y Harald.
Y es que cuando el destino está en juego, nunca tenemos respuestas, sólo profecías.