En la Moldavia del siglo XV, los habitantes de un pequeño pueblo rural sufren el acoso de las siniestras brujas moldavas, poderosas hechiceras depredadoras de niños. En un claro del bosque hay un grotesco árbol acerca del cual se explican innumerables leyendas, todas oscuras. Las brujas se reunirán siempre alrededor de este árbol, aunque no saben que esconde algo que es mejor no despertar.