«Tener diecisiete años es una mierda». Sin embargo, aún lo es más no encajar en ningún lugar.
Brendan lo sabe bien. Quizás es por su pelo, de un color anaranjado, o porque no ha nacido en Inglaterra. O, quizás, por ese extraño don que posee. Sea por lo que sea, lo cierto es que no parece encontrar su lugar en la vida.
Lo que Brendan no sabe es que está a punto de recibir un regalo de cumpleaños que cambiará toda su vida, porque, aunque él no lo sepa, su nacimiento está ligado a los Thuata Dé y a las dos espadas rúnicas que se forjaron para el rey... muchos años atrás.