En tiempos de pandemia a todo el mundo le apetece una buena fiesta, una farra, una bacanal. Y quizá los dioses olímpicos son la compañía ideal para montar una, que llevan mucho tiempo vivos y son probablemente inmunes a cualquier virus... Quizá con la excepción de la resaca. En cualquier caso, eso es lo de menos, porque esta burbuja de convivencia está siempre a punto de estallar.