Esta historia transcurre en noviembre de 1890. Watson se acuerda que es su segundo año de casado con Mary Morstan, y acude a la residencia de Sherlock Holmes porque su amigo está gravemente enfermo. Al llegar se consigue con una situación difícil, ve al detective, quien supuestamente no ha comido ni bebido en tres días, demasiado débil y hablando sin fuerzas, y parece que se está muriendo.
Contenido:
I. Introducción
II. La aventura del detective moribundo
III. Consideraciones finales