Todos odian la Selectividad.
Les hace competir por una puntuación que no necesitan. Elige quiénes son aptos para vivir y quienes no merecen los recursos de un mundo sobrepoblado. Les fuerza a profesiones que detestarán cuando todavía no se conocen.
Krys no lo acepta. Lucha, incapaz de contenerse frente a la injusticia, incapaz de encajar en un sistema deficiente. Sabe que si no es ahora, no será nunca.
Kendo lo acepta. Calla, observa, y busca resquicios por donde colarse. Sabe esperar y disparar con precisión. Aunque a veces sea tarde.
El tercero no actúa. Se nutre. Entiende. Se pregunta. Aprende, cuando los demás sólo combaten por sobrevivir.
¿De qué les sirve absorber información que no volverán a utilizar? ¿Qué sentido tiene enseñarles sin tener en cuenta lo que podrían ser? ¿Son ellos los únicos que necesitan aprender?
Esto no es educación.
Nunca lo ha sido.