Érase una vez un muchacho llamado Aladino que vivía en el lejano Oriente con su madre, en una casa sencilla y humilde. Tenían lo justo para vivir, así que cada día, Aladino recorría el centro de la ciudad en busca de algún alimento que llevarse a la boca.
Inesperadamente, la suerte de Aladino cambia cuando un hechicero llamado Jafar le propone conseguir todas las riquezas que se pueda imaginar a cambio de que él le consiga una vieja lámpara de las profundidades de la Cueva de las Maravillas, donde reside un divertido genio.