Perico era un conejo muy inquieto. Era bastante distinto de sus hermanas, tres conejitas muy buenas y obedientes. Él no quería más que correr aventuras; y un día, desoyendo los consejos que le había dado su mamá, se metió en el huerto del señor Mac Gregor. Se lo estaba pasando de maravilla comiendo zanahorias tiernas, lechuguitas..., cuando, de repente…
¿Queréis saber lo que le pasó al travieso de Perico? Pues no lo dejéis para más tarde: escuchad este audiocuento.