Una mañana mientras desayunan, Sherlock le dice a Watson: — Acabo de recibir un mensaje del oeste de Inglaterra. Me han pedido que vaya a investigar la tragedia del valle de Boscombe y me gustaría que vinieras conmigo. Juntos parten al bello condado de Herfordshire y en el lugar de los hechos les recibe el inspector Lestrade de Scotland Yard. Para él los hechos son muy simples: el joven James ha matado a su padre el granjero McCarthy ya que todas las pruebas apuntan hacia el. Aunque incluso para Sherlock Holmes las pruebas parecen evidentes, hay una joven desesperada, Alice Turner, que le suplica que la ayude demostrar la inocencia de James: ella le conoce bien y está segura que es imposible que él haya cometido el asesinato de su padre.