“El viaje de PresuntoCorpóreo” es una novela construida con fragmentos,
mas esos fragmentos trazan una geometría perfecta,
maniáticamente perfecta incluso. Y es precisamente
dentro de esa armonía estructural, de ese sólido edificio
apolíneo -y un tanto inquietante- que el autor procede
a la demolición de las certidumbres y de las identidades.
Paradoja, sí, en efecto, y es que los seres humanos
del siglo XXI somos esencialmente bichos paradójicos,
como bien ha señalado gran parte de la mejor literatura
contemporánea. Sin duda la obra de Alberto Corera está gozosamente
marcada por el experimentalismo y la libertad de la mejor
literatura de vanguardia, por ese dejarse llevar por el juego
y por el placer del lenguaje. La literatura como aventura.
La literatura como El Gran Juego.
Josu Montero.