Oh, Dioses del Más Allá, si acaso existís, ¿por qué nos habéis abandonado?
Sagratia, la esperanza y Fe de Alvitr. ¿Por qué nadie vela por esa paz? La maldad ha aflorado en
la vida. Los Unreins y Sjels han nacido. El pecado ha dejado de ser purificado, las almas no tienen un
descanso eterno.
La princesa de Infernia ha escapado del destino de la muerte para poner fin al abandono de los
Dioses. El mundo humano necesita ser venerado por los Dioses. ¿Será capaz de hacer realidad el sueño
de su abuela? Ecklesia ha marcado su objetivo. El mundo humano, creado por el gran Mneuma de los
Dioses primigenios, es mancillado por las acciones deshonrosas de los humanos. Merece ser destruido.
Princesa, ¿qué haría Luzbel?